16.1.10

haiti

Sentir esa satisfacción después de ayudar a alguien no tiene precio. Hoy me sentí tan bien conmigo misma. Y es que es doloroso ver las imágenes. Gente sufriendo, cadáveres, niños llorando... El panorama es desolador. Y ésta gente no puede hacer más que contenerse al ver los restos de sus viviendas. No se pueden evitar catástrofes de éste tipo, pero se puede ayudar. No toma mucho. Puedes hacer algo por éstas personas. Y créemelo: aquélla persona te lo agradecerá de por vida.

No comments:

Post a Comment